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¡Avancen mis soldados! ¡Griten mis soldados! ¡Peleen mis soldados!


Solo bastaron unas pocas rocas para acabar con todos los soldados que se enfrentarían al titán bestia, éste parecía divertido con todo ese escenario, todas esas muertes en sus manos. Era lamentable ver la manera en que terminaron, era vergonzoso.

El titán bestia se percató de algo en ese instante, girando su rostro observó el muro de titanes en el suelo, todos y cada uno de ellos habían sido derrotados.

Desde el cielo, entre todo ese humo y vapor, un gancho se estancó en su piel y el Capitán Levi Ackerman apareció con un aura demoniaca, con unos ojos que transmitían odio, con todas esas ganas de destrozar al titán bestia. No dudó en partir en rodajas el brazo entero del titán, sin darle tiempo a reaccionar, en un parpadeo atacó sus ojos y le cortó los pies sin remordimiento alguno. Al final cortó su otra mano y enterró sus cuchillas en la nuca del titán bestia obligándolo a salir.

—¡Parecías divertirte hace unos segundos, bastardo de mierda! —murmura Levi con odio, su cuchilla contra su boca. —Si estás herido no podrás volver a transformarte en un buen rato, ¿estoy en lo correcto? —pregunta, luego chasquea la lengua y entierra esa cuchilla hasta que atravesara casi su ojo. —Es de mala educación no responder, imbécil.

Pero mientras hablaba, su mirada viajó a los alrededores. Solamente necesitaba a un sobreviviente para poder inyectarlo y darle de comer al titán bestia, y aunque Levi estaba dispuesto a buscar a cualquiera, por su mente no dudó pasar la imagen del Comandante Erwin.

Metido en sus pensamientos no vio venir al otro titán inteligente de cuatro patas que tan pronto Levi se alejó, atrapó al hombre portador del titán bestia y huyó de ahí dejando a un Levi pasmado.

—¡Mátenlo! —ordena el titán bestia adolorido. —¡Agh! ¡Me haz herido, Levi! ¡Duele...!

Levi sujetaba sus cuchillas con fuerza, hiperventilaba. Todas esas muertes en sus manos, todas esos sacrificios... no, no podía dejarlo así.

—¡Se lo juré! —usó su equipo tridimensional para ir de titán en titán derrotándolos, eran demasiados pero no podía dejarse morir ahí, tenía que salvarse.

Quiso lanzar el gancho derecho pero quedó atascado, Levi cayó al suelo adolorido mientras los titanes se acercaban dispuestos a aplastarlo o comerlo hasta que apareció ella cortándoles el cuello.

Para Levi fue como ver un ángel atravesar los cielos para salvarlo, dio un suspiro cuando la vio aterrizar frente a él, apenas se puso de pie, Akira lo abofeteó.

— Deberías agradecer que las telas estaban desgastadas. —Akira no duda en abrazarlo con fuerza, después de ver a todos los soldados muertos temió lo peor hasta que lo vio luchar por su vida. —Debes ir con el titán bestia... debes ir a matarlo.

—No tengo gas ni cuchillas... —murmura Levi con voz ronca, Akira se arrodilla frente a él para quitarle los tanques de gas y ponerle los suyos. —No, Akira... no te dejaré sin gas...

—Está bien, puedes llevarme cargando sobre el muro y luego irás detrás del titán bestia... —explica su plan como si fuera lo más sencillo del mundo, luego le entregó sus cuchillas. —Vamos que se acercan más titanes.

Levi sujetó su rostro con tantos sentimientos acumulados y la besó, feliz de tenerla a su lado. Abrazó la cintura femenina.

—Sujétate. —ordena antes de usar el equipo tridimensional para ir al muro.

Entregar el corazón. |Levi Ackerman x OC| |Premios Wattys 2019|Where stories live. Discover now